Brasileños, paraguayos y argentinos unen fuerzas en pro de pueblos indígenas en Paraguay

Missão Paraguai

La Juventud Misionera por la Paz y la Red de Luz Planetaria, afiliada a la Fraternidade – Federación Internacional Humanitaria, realizó el 10.º Encuentro de Servicio a los Pueblos Originarios – Misión Paraguay, beneficiando a las comunidades indígenas de la región de Ciudad del Este, un municipio paraguayo ubicado en la frontera del país con el Brasil.

El evento se realizó los días 21, 22 y 23 de junio con 23 voluntarios argentinos (11), brasileños (5) y paraguayos (7). El sábado (22), el grupo se dividió para llevar alimentos a cuatro aldeas y desarrollar actividades en Puerto Barreto, donde varias familias indígenas los esperaban.

Missão ParaguaiAdemás de la distribución de ropa, calzado y alimentos en Puerto Barreto, se organizaron varias acciones paralelas para esta población, tales como lavado y corte de cabello, juegos recreativos con niños y charlas sobre prevención de enfermedades orales centradas en la higiene. También recibieron cepillos de dientes como parte de esta iniciativa de prevención.

Al final, el cacique y otros miembros hicieron la danza tradicional Mbyá Guaraní, con música rítmica de guitarra e instrumentos indígenas, como mabaraká y takuapu. La ceremonia, celebrada frente al Opy (hogar de oración y cura), fue una manifestación de agradecimiento a los misioneros, dijo el cacique, y agregó que «todos somos uno, independientemente de la religión, la nación o la forma de pensar».

Missão Paraguai El domingo, 23, fue el turno de la comunidad Mbyá Guarani Puerto Jiménez, donde los niños aprovecharon al máximo todas las actividades recreativas ofrecidas por los voluntarios. También hubo lavado y corte de cabello; así como donaciones de alimentos, ropa, recipientes y baldes para madres con bebés recién nacidos.

«Esta es una oportunidad para desarrollar la práctica del amor: amor en acción, amor en el pensamiento, amor en todos los actos», dijo Blanca Marín, de Posadas, Misiones, Argentina, que participó por primera vez en la Misión de Paraguay. «Agradezco a nuestros hermanos indígenas, pudimos experimentar la hermandad y confraternizar con ellos». Luisa Trotta también participó por primera vez, que utilizó su habilidad para apoyar al grupo como fotógrafa.