Esta fecha, establecida por las Naciones Unidas, destaca el compromiso de promover el entendimiento entre las culturas y los pueblos y subraya que «la diversidad de religiones, lenguas, culturas y etnias en el mundo no es un pretexto para el conflicto, sino un tesoro que enriquece a todos».
Para promover un espacio seguro y pacífico que contribuya a la promoción de la tolerancia, de la valoración de la cultura y de la fraternidad entre indígenas brasileños, migrantes y refugiados y la comunidad de acogida, la Fraternidad – Federación Humanitaria Internacional (FFHI), en colaboración con la Operación Acogida, creó el Centro Cultural y de Formación Indígena (CCFI), con sede en Boa Vista, Roraima, Brasil.
El CCFI ofrece oportunidades para construir una vida más digna, basada en el desarrollo de medios de vida que promuevan soluciones duraderas a través de cursos de formación profesional, aprendizaje de portugués e informática, así como talleres para emprendimientos, entre otros.
El coordinador del CCFI, Imer, enfatiza que «la convivencia pacífica entre los pueblos indígenas genera posibilidades de manifestación genuina de sus culturas y fortalece sus costumbres y tradiciones, garantizando así los derechos de los individuos, los grupos y la comunidad que acoge a todos estas personas».
«Entre los atributos y valores de la Fraternidad – Humanitaria (FFHI) expresados en el CCFI se encuentra la posibilidad de que las personas entiendan que todos tenemos un potencial, inherente al ser humano, y que si nos esforzamos y fortalecemos nuestra voluntad, podemos descubrir, desarrollar y fortalecer esas capacidades para poder ser parte de la sociedad y contribuir a un mundo mejor y más justo», señala Imer.
Fray Thomas, asistente de la Coordinación Regional de la Misión Roraima, señala que la Fraternidad – Humanitaria (FFHI) entiende a la humanidad como una única familia humana. Por eso se basa en los principios de fraternidad entre los pueblos, de servicio abnegado al prójimo y la construcción de una cultura planetaria de paz.
Sobre la misión del CCFI, fray Thomas subraya que «todos los proyectos tienen como objetivo valorar la cultura nativa y, al mismo tiempo, proporcionar el aprendizaje necesario para una integración social en el mundo moderno. En la actualidad, el CCFI se transformó en un lugar de encuentro interétnico, ya que los indígenas brasileños también realizan los cursos y proyectos que allí se ofrecen.
La tolerancia, una virtud vital en tiempos de conflicto
En el Día Internacional de la Tolerancia, la ONU recuerda que el mundo vive una era de extremismo y violencia crecientes y que los conflictos son cada vez más amplios, caracterizados por una falta de respeto fundamental por la vida humana», por lo que «la tolerancia nunca fue una virtud potente».
En este escenario geopolítico global, en el que los conflictos se intensifican, la Fraternidad-Misiones HumanitariasInternacionales (FMHI) lleva a cabo la Misión Polonia Humanitaria, cuyo objetivo es prestar asistencia a las personas afectadas por la guerra que, según datos de la Agencia de la ONU para los Refugiados (Acnur), ya forzó el desplazamiento de más de 11 millones de personas desde Ucrania hacia los países de la Unión Europea, siendo Polonia el principal país de destino. Las mujeres y los niños representan más del 90% del contingente que llega al país.
Rafael Corbetta, coordinador de la Misión Polonia Humanitaria, subraya que «la tolerancia en el contexto de las misiones humanitarias está directamente relacionada con el principio de imparcialidad y neutralidad, presente en el código de conducta de la Fraternidad-Misiones Humanitarias (FMHI), ya que los servidores humanitarios buscan, a través de un servicio fraterno y desinteresado, llevar alivio y dignidad en contextos de crisis sociales o humanitarias, sin discriminación de raza, género, credo, religión, nacionalidad o convicción política, independientemente del lado en el que se encuentren».
El servidor humanitario, Ricardo Treno, evalúa que «dentro del escenario de intenso conflicto en Europa del Este, la Misión Polonia Humanitaria es la contribución que la Fraternidad-Misiones Humanitarias (FMHI) puede dar para aliviar el sufrimiento que está dejando profundas cicatrices entre pueblos hermanos. Nuestra aspiración es poder llevar una gota de fraternidad a los corazones heridos, para que la gente no olvide que todos somos parte de una gran familia humana”.
Vea los videos de la Misión Polonia Humanitaria
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