Los misioneros de la Misión Grecia, una de las campañas permanentes de la Fraternidade – Federación Humanitaria Internacional, continúan colaborando con las Misioneras de la Caridad de Madre Teresa de Calcuta. Ahora iniciaron un apoyo a la casa Atenas 2, un albergue para refugiados que las religiosas administran en el barrio Kipseli de la capital griega.
Allí, 20 personas, entre mujeres y niños, viven acogidas por cinco monjas. La mayoría son migrantes que huyeron de diversos países de África y algunas son mujeres solas de la propia Grecia y de otros países europeos, como Albania y Georgia, que están sin trabajo y en proceso de recuperación de adicciones a drogas. Las refugiadas africanas llegaron de Eritrea, Congo, Burkina Faso y Nigeria. Algunas están embarazadas y otras se encuentran con sus hijos menores. También está asilada una refugiada siria con su pequeño.
Los integrantes de la Misión Grecia ayudan en la realización de mejoras en la estructura edilicia (electricidad, sanitarios, aislamiento del frío en puertas y ventanas, entre otras), así como en la atención a los niños y en el apoyo a las mujeres refugiadas. También asisten a las religiosas en el transporte para compras y en la gestión de visas por internet para las refugiadas.
El lunes último, los miembros de la Misión Grecia acompañaron a las monjas católicas hasta un campo de refugiados localizado en la localidad de Glifada, en las afueras de Atenas, donde entregaron donaciones de ropas y compartieron momentos con los niños. En el lugar se alojan un millar de migrantes de todas las edades, la mayoría proveniente de Afganistán. El local es gerenciado por una asociación dinamarquesa.
La Misión Grecia es una de las tres misiones que la Fraternidade – Federación Humanitaria Internacional lleva adelante en estos momentos, junto con la Misión Roraima Humanitaria y la Misión Emergencia Chile. Ella es una Misión Permanente.
Las actividades comenzaron en setiembre de 2016 con la fundación de una nueva sede de la Fraternidade –FFHI- en Grecia. Desde entonces, el grupo apoya servicios brindados a los refugiados e indigentes griegos por las Misioneras de la Caridad, la organización católica Caritas Hellas y una iglesia ortodoxa de la ciudad de Anávissos, a 2 kilómetros de Palaia Fokaia y 34 kilómetros de Atenas.
