Kawarao, ‘Nuestra Familia’, la historia del espíritu empresarial de un joven refugiado

Bruno Avilo Arintero Quiñonez, de 20 años, residente del Refugio Pintolândia, es un joven de la etnia Warao, que transitó rápidamente la senda entre el curso de formación en confección de calzado y la creación de una marca exitosa, “Karawao”.

Kawarao, 'Nuestra Familia' ”.

Como el mismo lo describe, “en cuanto terminamos el curso nos reunimos cinco personas para producir, pero no resultó. Por eso pensé en trabajar con mi familia, que enseguida aceptó” A continuación, el mismo les enseñó el oficio y crearon la marca de alpargatas Kawarao, que significa ‘Nuestra Familia’ ”.

La capacitación fue organizada por el Centro Cultural de Formación Indígena (CCFI), inaugurado a principios de este año, precisamente, con el objetivo de brindar integración cultural y formación profesional a los refugiados, según explicó la hna. Maria de Kibeho, integrante del área de artesanía y de emprendimiento, «la Fraternidad – Federación Humanitaria Internacional (FFHI) se enfoca en fomentar emprendimientos como posibilidad de transformar los talentos y potencialidades de los referidos beneficiarios en un medio de vida digna y enriquecedor a nivel personal y social».

Kawarao, 'Nuestra Familia' ”.

Existen innumerables ofertas de cursos de formación y capacitación disponibles para el Sector de Medios de Vida y Soluciones Duraderas de la Fraternidad – Humanitaria (FFHI), quien sigue de cerca los procesos vivenciados por los refugiados indígenas ofreciendo, además, la posibilidad de colocar en práctica los aprendizajes. “Este espacio de práctica fue diseñado para que no se pierda el conocimiento adquirido en la formación”, enfatiza la hna. María de Kibeho.

Precisamente así tuvo inicio y prosigue el proyecto del, ahora, emprendedor Bruno, según el mismo explica: “tomamos pedidos, confeccionamos las alpargatas y entregamos, todo se realiza en el propio Centro de Formación (CCFI)”.

El joven Warao ha sido un ejemplo tanto de éxito como de determinación y ya tiene planes para el futuro: “Creo que en un tiempo la marca de calzado Kawarao puede trasladarse, tener su propio espacio, aumentar su producción y ventas”.

Su historia trae alegría y alienta no solo a los indígenas acogidos, sino también a todo el equipo de voluntarios y servidores humanitarios presentes en la Misión Humanitaria Roraima.

Kawarao, 'Nuestra Familia' ”.